RESPUESTA OBLIGADA
Por Sergio Villa U.
Pido disculpas a un respetable lector por haber insultado su capacidad humana de raciocinio con mi supuesto racismo. Pero, no me retracto al decir que sí considero al actual gobierno como el más racista que conocí, y lo hacen abiertamente, pues con solo leer su Constitución Masista Sangrienta, nos muestran cómo piensan proceder hoy y continuarán haciéndolo mañana, discriminando a otros sectores sociales que no pertenecen a los de ellos.
Ayer lo fue, hoy lo es, mañana y siempre el campesino será tratado como un pongo, ¿acaso no vemos cómo hoy son arreados como a un rebaño de ovejas y nada menos que por un gobierno, supuestamente proletario y gran defensor(?) de la misma raza indígena?, sabemos que los Presidentes Belzu, Morales, Daza y Villarroel intentaron ayudarlos devolviéndoles sus tierras y que los cuatro murieron asesinados; Paz Estensoro también lo intentó confeccionando una Reforma Agraria que fue muy bien elaborada pero, muy mal ejecutada y tan desordenadamente llevada a cabo; después de 50 años de su emisión, aún continúan distribuyendo los documentos que les otorgan la propiedad de las tierras, y esta pobre gente pagando con el poco dinero ahorrado solo para esto, y ver si así se aceleran sus trámites y tener, al fin, sus tierras propias. Y al leer la nueva Constitución Masista Sangrienta nos encontramos con que les están quitando sus tierras, pues todas ellas pasan a poder del Estado, las que serán distribuidas nuevamente de acuerdo a lo que decida a quienes entregará su dirigente sindical, cacique o algún “capo” del partido de gobierno, estoy seguro que ninguno de los presidentes asesinados hubiera aceptado jamás semejante situación. Hacen más de 1.000, por no decir 3.000 o más años, estos humanos infelices fueron tratados como yanaconas, y como tales lo único que saben hacer es obedecer a sus supuestos amos, y todos los supuestos dueños de estos esclavos son los únicos que viven mejor que ellos, gracias al abuso que ejercen sobre esta ciudadanía que soporta todo el peso y el trabajo. Fueron esclavos desde antes y durante el Imperio Incaico, y después, durante el Imperio Español y hoy, en plena república plagada de leyes que no los protegen, aunque especifiquen que los amparan, continúan viviendo igual que en el pasado. ¿Y qué Gobierno pondrá las cosas en el lugar que le corresponde?, ¿el actual?, no creo, y los propietarios de las tierras, ya sean indígenas, mestizos o criollos de hoy, dejarán de serlo mañana, ya que así lo especifica la siniestra Constitución Masista Sangrienta que están tratando de imponerla. Y el campesinado no sabe que al apoyar a este gobierno, está perdiendo su derecho a la propiedad que antes era de él.
Les recomiendo a mis lectores que visiten alguna de las hemerotecas de la ciudad donde residen y soliciten el periódico “Correo del Sur” del 30 de Julio del 2006, en el cuadernillo: “Panorama”, busquen la página Nº. 3 y lean el capítulo: “En el altiplano la Pachamama está dividida en surcofundios”. Ahí sí recién se aprecia el drama que vive toda esa ciudadanía abusada, y la pobreza en que se encuentran, tan cercana a la indigencia y al hambre. En la zona central de mi ciudad fácilmente en cada cuadra se encuentran entre cuatro a cinco mujeres u hombres, mayores (tercera edad), a quienes se los ve famélicos por estar mal alimentados, avejentados y peor vestidos. Todo el cuadernillo antes citado está dedicado al tema tierras. También en La Prensa de la ciudad de La Paz lo publicaron pero, no puedo indicar la fecha porque la ignoro.
Esa población ignorante y nada instruida, siempre vivió así porque ningún gobernante del pasado jamás se preocupó por ellos, y hoy tampoco a nadie le interesa darle solución a este problema nacional; sé que hay muchas escuelas distribuidas por la campiña pero, esos niños apenas aprenden a leer y escribir, porque al segundo o tercer año ya tienen que ayudar a sus padres en las siembras y cosechas, y se ven obligados a abandonar sus estudios. También sé que muchos padres de familia vienen a Sucre y dejan a sus hijos, de 8 ó 10 años para que trabajen y subsistan por sí mismos, pues ellos no pueden alimentarlos en sus hogares; estos niños trabajan en los mercados cargando bolsas más grandes que ellos y también acarrean las bolsas de las señoras que compran los productos en estos locales; hay otros que trabajan lustrando zapatos. Y no creo que los gobernantes de hoy, aunque se califiquen de pro-indigenistas, hagan algo por el campesinado. Ya vimos en varias oportunidades como los “usaban” para que se enfrenten con cualquiera que no esté de acuerdo con el gobierno. Resumiendo, “son carne de cañón” en cualquier circunstancia. Un analista político le da un nombre a esta forma de someterlos: Pongueaje político.
Se me califica de racista solamente porque me provoca molestia el proceder que tienen los aymaras con la ciudad de La Paz. Reconozco que fui duro con mis expresiones pero, ¿cómo quieren que reaccione?, ¿acaso ya nadie recuerda cómo avasallaron a esa ciudad por lo menos una vez a la semana esas multitudes de hombres violentos que reclamaban cualquier cosa, aunque sea su pedido imposible de ser atendido?, y todo porque sus dirigentes quería ganarse las indulgencias de sus bases. Lo que sí debe recordarse, es cómo los peatones que trabajan, ya hastiados de estas manifestaciones, abucheaban y silbaban mostrando su repulsa hacia alguna de esas manifestaciones cotidianas, y cómo fueron agredidos por esta multitud sólo por mostrar su cansancio y disgusto ante esta rutina desagradable para esa población respetable y consciente, honesta y seria, trabajadora y ejemplar, y por sobre todo, pacífica y nada afecta a la violencia, que soporta todo lo que estas muchedumbres quieren que aguanten. ¿Hasta cuándo van ha seguir soportando los paceños esa prepotencia?
Y ahora, estimado lector, ¿el racista es el que se opone a los pendencieros dirigidos?, ¿racista es el que se opone a la prepotencia de las multitudes?, ¿racista es el que se opone a que una manifestación agresiva acometa a nuestra ciudadanía pacífica?, y no hace mucho un grupo de la verdadera paceñidad salió a las calles con los pañuelos blancos pidiendo unidad y paz y, ¿de qué les sirvió?, pues como era de esperar, no faltaron las hordas aymaras dirigidas y decididas a provocar enfrentamiento con los pacifistas. Si ante estas circunstancias y por haber sido duro en mis expresiones contra los aymaras por su comportamiento casi permanente de hostigamiento, se me califica de racista, desde ese punto de vista, sí soy racista, pues lo menos que me agrada es la violencia dirigida, y ya sabemos por quienes.
¿Por qué los Ponchos Rojos creyeron que atemorizarían a los chuquisaqueños degollando a esos perros que no le hicieron ningún daño a nadie?, aquí, ese hecho a la población no la intimidó. Ya la ciudadanía vio la reacción de este pueblo contra la arbitrariedad del gobierno de turno. Los Ponchos Rojos tuvieron que salir de Sucre con el rabo entre las piernas, junto con los asambleístas y la Policía. Se apreciaba muy fácilmente que esta ciudadanía estaba muy furiosa y no hay situación que no soliviante más a los habitantes de una ciudad, que la ilegalidad, como la ejecutada por la Asamblea cuando incumplió las reglas que ellos mismos habían establecido.
Respetado lector, ¿recuerda el mensaje del Presidente Saavedra?: “envíenme mil ovejas de Achacachi”. Las “ovejas de Achacachi” eran los nativos de esa población que debían ser enviados a apaciguar a unos revoltosos opositores a su gobierno. Y, ¿hoy no hacen lo mismo?, y mañana con seguridad lo seguirán haciendo, no importa quién nos gobierne.
Afortunadamente nunca pertenecí a ningún partido político, y jamás obtuve ninguna prebenda de ningún gobernante o persona influyente. Siempre viví muy sencillamente, tanto así que jamás me sobró un poco del sueldo a fin de mes.
Las clases sociales siempre existirán, y nadie puede evitarlo. Soy considerado blancoide (q’ara), y soy mestizo como el 90% de los bolivianos; tengo tres antepasadas incaicas: Catalina Paukar Ocllo, Palla del Quzco – Catalina Sisa Ocllo – Palla Francisca María Poco (Princesa inca). El título de “Palla” (Señora), otorgaba el rey de España a la alcurnia incaica, y el nombre “Ocllo” lo llevaban cuando eran descendientes de la “Mujer Principal” del Inca, no importando si eran hijas o nietas. Este tenía muchas ñustas y a los descendientes que tenía con ellas no les daban el nombre de “Ocllo”.
Se dice que “Chuquisaca (ahora llamada Sucre) también manipuló e insultó a otras regiones de este País e incluso de maneras más bajas que una guerra abierta, habría que hacer un poco de memoria, y recordar que aún cuando los Virreynatos ya habían caido, la gran Audiencia de Charcas seguía considerándose territorio español, no por nada este País terminó siendo el último en conseguir su tan anhelada independencia,” y opinan que: “constituye como legal según la ley de 1939 (quiso decir: 1839), no fue más que una manipulación al mismo estilo que ahora repudiamos la manipulación de este gobierno, Sucre, se hizo de la capitalía (quiso decir: capitalidad, pues esa palabra no existe en el diccionario) a costa de la traición de la misma Patria, tras ayudar de manera abierta al ejército invasor chileno que disolvió la confederación Perú-Boliviana, lo más cercano al sueño del Libertador que se tuvo en América del Sur, a Sucre no la veo más que la capital histórica de este País, puesto que en sus cimientos aún se conserva la historia colonial de nuestra república.”
Respondo al primer subrayado: Sucre nunca manipuló e insultó a otras regiones, y menos aún de las maneras más bajas. ¿Acaso nadie recuerda el trato que le dio la ciudad de La Paz a la ciudad que fue la cuna de la libertad?, ya un historiador paceño dijo que mi ciudad era rival de la ciudad de La Paz, Sucre nunca rivalizó contra ninguna otra ciudad, fue La Paz la que siempre fue rival de Sucre, ¿o alguien puede explicarme el por qué los historiadores paceños y sus autoridades en forma permanente vilipendian a la revolución de Mayo?, ¿por qué uno de los historiadores del norte (don Manuel María Pinto) difamó con expresiones despectivas y ofensivas a los héroes nacionales como Arenales y los hermanos Zudáñez, solo por haber estado entre los principales complotados en la revolución de Mayo?, ¿acaso como historiadores no sabían que éstos y otros que los acompañaron en esa fecha magna para América fueron los que fomentaron el levantamiento del 16 de Julio?. Antes que se mutile el territorio del Departamento de Chuquisaca en beneficio de los departamentos vecinos, ¿por qué los diputados y senadores paceños apoyaron a estos departamentos con su voto para que se cercene a Chuquisaca?, ¿nunca leyeron los libros de historia escritos por los señores José Rosendo Gutiérrez, Luís F. Jemio, José Vicente Ochoa, Manuel María Pinto (h), José María Baldivia Galdo, Juan Reyes Aramayo y la Sra. Genoveva Loza Balsa? Si no lo hicieron, les adelanto la noticia: en la mayoría de sus páginas lo único que hacen es agredir al 25 de Mayo de 1809 tratando de descalificarla como la fecha magna de América, y lo hacen sin pruebas documentales que justifiquen semejante despropósito. ¿Los historiadores y las autoridades chuquisaqueñas desprestigiaron alguna vez de esa manera al 16 de Julio de 1809?, desde luego que no, pues lo único que hacen es corregir las hipótesis indocumentadas de sus autoridades e historiadores.
Y ahora solo caben un par de preguntas, ¿quién es el rival de quién?, y ¿quien ofende a quien? Por favor, lean en este mismo blog, “Respondiendo a un desafío”, es el resumen de una respuesta que di a dos historiadores paceños ante su demanda de pruebas documentadas que demuestren que hubo un levantamiento en Mayo de 1809, y también háganlo con “Chuquisaca Ultrajada”, para que sepan cuánto territorio rico en ganadería, gas y petróleo perdió Chuquisaca con la gentil ayuda de los votos, en las Cámaras de diputados y senadores de los paceños de antaño. Y aunque no me crean, nosotros nunca acosamos a ese Departamento, siempre fueron ellos los que nos hostigaron, y eso consta en la prensa escrita, y en los textos de los libros de historia confeccionados por paceños.
Luego del triunfo de don José María Achá en las elecciones para la presidencia de la República, su contendor perdedor, el general Gregorio Pérez, paceño, y sus seguidores, al no habérseles satisfecho el deseo de triunfo que tenían por su candidato regional, le hicieron una revolución en su ciudad al nuevo Presidente. Los revoltosos descontentos hicieron el levantamiento y tratando de justificar su acción buscando varios motivos o alternativas, la primera, separatismo de la nación e independencia, la segunda, autonomía, la tercera, federalización, la cuarta, anexión al Perú, y también propusieron conformar su propio país con Oruro y Cochabamba con la sede de gobierno en La Paz. Ya con anterioridad don Andrés de Santa Cruz tenía en mente la anexión del departamento de La Paz al Perú. En la ciudad de La Paz, luego de la asignación a la ciudad de Sucre como Sede de los Tres Poderes del Estado, Ley de 1898 (como Capital de la República, ya era Sede de los poderes, y la promulgación de esa Ley era innecesaria), al ver que no los contentaron en sus proyectos de ser Sede de Gobierno, los directivos paceños propusieron algunas alternativas, la independencia, la anexión al Perú o la federalización.
La Paz y Potosí eran las que más aportaban al erario, La Paz siempre reclamaba por sus aportes excesivos, y Potosí, ¡nunca! lo hizo. Sin duda que de todas las ciudades del país, la más boliviana siempre fue Potosí. Potosí lo dio todo desde su fundación; con su producción sostuvieron todos los territorios de dos virreinatos, Lima y Buenos Aires. Y durante la República continuó dando todo lo suyo, y hoy, ¿qué tiene?, ¿recibió alguna vez una migaja del Estado?, es indiscutible que esta ciudad fue la más esquilmada por los administradores del Estado. Y hoy sigue soportando silenciosa.
En cuanto al segundo subrayado, solo puedo decir que los españoles trataron de mantener a toda costa en poder de la Corona a Potosí y La Plata pero, al final no pudieron conservarlas. Es cierto que fueron las últimas en liberarse por el motivo que acabo de mencionar, ¿cómo es posible que la primera ciudad que se levantó contra el Imperio quiera seguir perteneciendo al mismo?, ¿no les parece que esa hipótesis va en contradicción con los hechos?, esa afirmación ya resulta una hipérbole. En esas dos ciudades se encontraba todo el poder económico del territorio de la Audiencia y era muy natural que los españoles hicieran todo lo posible por conservarlas. No entiendo porqué alguien pueda extrañarse de esto, o es que se busca de esta forma echarle alguna culpa a esas dos poblaciones de un acontecimiento muy natural.
Y ahora respondo al tercer subrayado: La Ley de 1839 es legítima, y denunciar a Sucre como ciudad traidora a la patria, es uno de los mayores disparates que leí en mi vida, y la considero una difamación a mi ciudad, y sólo porque don José Miguel de Velasco en el sur y Ballivián en el norte, derrocaron a don Andrés de Santa Cruz luego de uno de sus fracasos como guerrero en el enfrentamiento con Bulnes. En el Perú se regocijaron sus opositores por la caída de la Confederación, pues sin duda que hubo una confabulación combinada con los chilenos. Qué ocurrencia que se diga que Sucre se hizo de la “capitalía” (debía decirse: capitalidad, pues esa palabra no existe en ningún diccionario) a “costa de la traición a la misma Patria”. ¡Ni un solo soldado salió de Chuquisaca a Yungay a respaldar a los chilenos para “ayudar de manera abierta al ejército invasor chileno”!, ¿acaso no es eso lo que se insinúa?, el resentimiento que se siente contra Sucre nace de la envidia, y todo por que la ciudad del norte no tiene la historia como la que tiene ésta: La Plata, la primera ciudad fundada en el Alto Perú, y por lo tanto la más antigua, se la creó en 1538, y recién en 1542 se fundó el virreinato de Lima y La Paz en 1548. La Plata, Sede de la Real Audiencia de Charcas. La Plata, Capital de todo el territorio de la Audiencia de Charcas. La Plata, Primera Sede del Arzobispado Metropolitano. La Plata, Administradora de toda la economía desde Buenos Aires hasta más allá del Cuzco. La Plata, lugar donde se fundó la Universidad más importante que tuvo la Audiencia de Charcas. La Plata, ciudad donde se dio el Primer Grito Libertario en la América Hispana. Chuquisaca, ciudad donde se firmó el Acta de la Independencia. Chuquisaca, población donde se reunió por primera vez una Asamblea independentista en el Alto Perú. Chuquisaca, lugar desde donde por primera vez se administró nuestra Nación independiente. Chuquisaca, ciudad donde se dictó la Primera Carta Fundamental. Y por último, los territorios de la Intendencia de la Plata sirvieron para fundar Tarija, y la creación de parte de la Provincia Cordillera. El Departamento de Chuquisaca cedió su territorio para la formación del Departamento de Oruro, y posteriormente se cercenó gran parte de su territorio para los Departamentos de Santa Cruz y Tarija.
No niego que hubiera sido interesante la Confederación y que quizás nos hubiera ido mejor como país pero, no se considera la oposición que tenía el Mariscal Santa Cruz en el Perú, y por eso no creo que hubiera durado mucho tiempo esa alianza.
Tampoco creo que haya habido ninguna manipulación de parte de los sucrenses, y para probarlo transcribo algunos de los pasajes escritos en el Acta del 10 de Julio de 1839, día que en el Congreso General Constituyente se resolvió otorgarle dos honores a Chuquisaca asignándole el nombre de Sucre y designándola como Capital de la República, y por lo tanto, Sede de los tres poderes del Estado:
“… el H. Sr. Secretario Reynolds… (dijo):…porque Chuquisaca entre sus gloriosos trofeos contaba con el muy honroso de ser constantemente aborrecida por los tiranos………en ser una de las tierras más a propósito para la fructificación de los cimientos de la libertad, no podía quedar enmudecida, cuando se trataba de una cuestión de toda vitalidad para su patria………fuera de Bolivia, ninguna de las capitales ha visto ponerse siquiera en duda su continuación en el goce de esa prerrogativa, y que solo se disputa á mi pobre patria en el Seno del Congreso más justo de Bolivia………Entrando después de este a examinar la materia, hizo mérito de que Chuquisaca era la ciudad mas antigua de Bolivia como fundada en 1539 (debía decir: 1538) que por 300 años había presidido sin disputa a todas la ciudades del Territorio Boliviano; que había sido asiento de la única real audiencia que antes de la revolución existía en este país; que la sede del Arzobispo Metropolitano había sido colocado en Chuquisaca; y que en lo espiritual fue la Capital de todo el Virreinato de Buenos Aires; que ella sola había poseído una Universidad, Academia de Derecho y dos colegios………que á estos establecimientos habían correspondido, y se habían formado en ellos hombres ilustres en la carrera del foro y de la Iglesia, y especialmente los primitivos agentes de la causa sagrada de la independencia………de haber sido Chuquisaca el lugar donde se reunieron los representantes del Pueblo Boliviano para Sancionar su independencia…”
“… el H. Sr. Reyes… (dijo):… Chuquisaca tiene a su favor el tiempo inmemorial para ser Capital de hecho………Como Capital ha gozado de la posesión de una audiencia y de un gobierno eclesiástico Metropolitano………y como tal en este lugar se ha dado el solemne pronunciamiento de nuestra independencia, cuyo grito ha resonado desde el uno hasta el otro polo del continente americano…”
“… el H. Sr. Valle (representante de La Paz)… (dijo):… La voz del orador Señores, no alcanzará a elogiar al verdadero merito, ¡que digo de un pueblo! Pero ni el de un solo hombre, cuando por su patriotismo y virtudes cívicas se hace acreedor al aprecio general………solo expresaré que el Departamento que represento colocado a mas de cien leguas de esta Capital………desde el catorce de Febrero, desde aquel día para siempre memorable quisieron pagar este tributo de justicia a la hermosa Chuquisaca proclamándola por Capital de la República, y distinguiéndola mas particularmente con el nombre ilustre del vencedor de Ayacucho padre y fundador de Bolivia. Tales fueron los votos de La Paz, tales las instrucciones que hoy se expresan por sus apoderados con las mas vivas conmociones de placer.”
“… el H. Sr. Escobar… (refiriéndose a la Capital Provisional, dijo):…Todo lo provisorio tiene una existencia precaria: neutraliza los trabajos y los anula. Así nos ha sucedido en la época pasada, sin saberse si quedaría de Capital propietaria, no se ha provisto un establecimiento, ni un adorno: el Gobierno ni los Congresos han pensado mandar construir los establecimientos necesarios a la Capital, de manera que se puede decir que la República ha sido un cuerpo que no ha tenido Cabeza: y en lugar de atender este país se le ha querido dar muerte.”
No disertaron los cincuenta representantes nacionales pero, sí algunos de los que representaban a sus bancadas, y los que expresaron su pensamiento aprobaron el cambio de nombre a la ciudad y la designación de ésta como Capital de la República y, aunque no se crea, fue la decisión por unanimidad. ¡No hubo ni un solo voto disidente!, y con éstos están incluidos los diez representantes paceños. Cree usted, estimado lector, que ¿también los paceños fueron manipulados por los chuquisaqueños?, ¿y que los chuquisaqueños hicieron que se disuelva la Confederación Perú-Boliviana?, ¡vaya ocurrencia!
Sólo la ciudad de La Paz la ve como Capital Histórica a Sucre. El resto de la República la ve como Capital Constitucional e Histórica, y no de facto, como se la ve a la ciudad de La Paz. Le ruego a cualquiera de mis distinguidos lectores, que me envíen por esta misma vía, un documento que la certifique a esa ciudad como Capital de la República pero, no me manden el Decreto del 14 de Abril de 1899, decreto con el que la autonombran los revolucionarios paceños a la ciudad de La Paz como Capital de la República, ¡sin que un Congreso General Constituyente la sancione como Ley! y éste Decreto no deroga ninguna Ley ya emitida con anterioridad. He insisto, el documento debe ser otra Ley que derogue la anterior.
Sergio Villa Urioste.
Sucre, 15 de Enero del 2008.